Al ser el lavado de activos una conducta que es considerada delito los riesgos a los que están sometidos los empresarios, comerciantes y los negocios se pueden resumir en:
- Persecución penal
- Suspensión y cancelación de la personería jurídica
- Exclusión de fuente de financiación
- Bloqueo internacional (inclusión en listas internacionales)
- Mala reputación
- Altos costos de remediación
- Continuidad del negocio
- Pérdida del patrimonio (acción de extinción de dominio)